Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando las entradas de octubre, 2020

La juventud se va y nos volvemos viejos

  Así dice la canción de Sandro, esa que tanto le gustaba cantar a mi difunto tío Gustavo cuando agarraba su guitarra y arañaba sus cuerdas en medio de la bohemia.  Cuando la escuchaba me parecía muy lejana a mi realidad, hasta ahora. Este año se fue volando. Y aunque ha pasado de todo, a veces parece como si no nos hubiéramos dado cuenta de eso.  Apenas entrábamos a marzo cuando estalló la pandemia de este malparido virus y todo a lo que estábamos acostumbrados se fue a la mierda. Entonces, desde hace algunas semanas, los que nos gobiernan decidieron que ya era hora de sacarnos de la mierda poco a poco. Y fue como si todo este tiempo de terror se hubiera pasado en un parpadeo. De repente estamos a menos de 90 días de que se acabe el año más hijo de puta de la historia.  Así me pasó con mi juventud. Siento que se fue en un parpadeo y aunque hice de todo, es como si no me hubiera dado cuenta de eso.  Ya con 35 años no puedo decir que soy joven. No puedo decir que soy una promesa. Se me